En el deporte la percepción de los elementos y estímulos externos es de vital importancia, ya que nuestro cuerpo se amolda o se adapta al entorno y a las acciones de juego a través de los sentidos. Las sensaciones propioceptivas como la de ubicar nuestro cuerpo en un espacio es algo de lo que nos ayudamos todos los días en el deporte, simplemente para ver nuestra colocación del cuerpo o de una bola de tenis.
Nuestra actividad física se encuentra condicionada por los factores externos que percibimos, pero no todo el mundo es condicionado de la misma manera ya que la percepción es algo subjetivo. Al igual que no a todo el mundo le condiciona lo mismo ya que la percepción también es selectiva. La experiencia de una sensación hace que la persona se adapte y cambie para mejorar.
Siendo claros, lo que nosotros percibimos por los sentidos forma parte fundamental de un deporte ya que nadie jugaría a un juego como el baloncesto sin saber donde está nuestro rival, la canasta o la pelota, sería imposible jugar o hacer un deporte sin percibir nada del exterior. Un buen ejemplo de esto son los deportes paralímpicos como el fútbol para ciegos, ellos no pueden ver el balón pero a través de un cascabel que se introduce en el interior del mismo pueden desempeñar su juego. Este ejemplo nos sirve para darnos cuenta de que si no es la vista, otro sentido entra en juego para poder llevar a cabo la práctica deportiva
En conclusión, los sentidos son una de las cosas más importantes en el deporte y solo los grandes deportistas los tienen bien desarrollados para poder desempeñar su función a un alto nivel competitivo, por eso debemos entrenar los sentidos como entrenamos nuestro cuerpo..
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